martes, 5 de agosto de 2008

quedan entre los dedos
pensamientos rumiantes
de enredadera incierta
de escaleras al sueño
mastica pena el olvido
en su blanca espera
duermen los pies
afuera de la tormenta
y en medio de los mares
el mirar de una perla
que da lugar a llegar
a costas de fortuna
donde el sol sale
siempre por la costura

2 comentarios:

Unknown dijo...

Me alegro mucho que le haya gustado a mi los suyos también. Lo seguire esperando x mi blog
besos

Anónimo dijo...

El sol sale siempre, querido poeta, en lo más oscuro de la noche, tras la más terrible de las tormentas.

Beso cálido, de sol